El uso de un bastón blanco es tradicionalmente reservado para los discapacitados visuales o ciegos. El interés de este bastón blanco es doble. Por un lado, les permite identificar los escalones y los posibles obstáculos en su camino. Por otra parte, el color blanco permite distinguir a las personas del entorno que esta persona tiene un problema de vista: así la gente de su alrededor se aleja para no interrumpir el trayecto de la persona ciega y pueden proponer ayuda para cruzar la calle, etc. Actualmente hay bastones blancos electrónicos. Ellos detectan los obstáculos a una distancia más larga y los señalan mediante vibraciones.