La hipertensión intracraneal es el aumento de la tensión en el interior del cráneo. El cráneo es inextensible y si las estructuras del cerebro aumentan de volumen sin que ninguna de las otras estructuras la compensen aparece el aumento de la presión intracraneal.
La hipertensión intracraneal puede ser debida a un aumento de las estructuras del cerebro como es el caso de los tumores, la acumulación de sangre en hemorragias cerebrales, los hematomas intracraneales, una tromboflebitis cerebral o el aumento del volumen líquido cefalorraquídeo (llamada hidrocefalia) que no pueda ser suficientemente absorbido. La hipertensión intracraneal es grave porque la presión ejercida sobre las estructuras frágiles puede provocar daños irreversibles.
Los síntomas que aparecen son dolor de cabeza, vómitos, problemas visuales (normalmente visión doble).