El flutter auricular es un trastorno del ritmo cardíaco. Esta patología suele ser descubierta en un electrocardiograma de modo fortuito; a veces el paciente refiere sensación de palpitaciones rápidas. Esta enfermedad es debida a una alteración del control de la contracción de las aurículas y de los impulsos eléctricos con alteración del circuito. Se presenta como una taquicardia ventricular a 150 latidos por minuto aproximadamente sin ninguna pausa, con un aspecto típico y fácilmente reconocible por un electrocardiograma.
El tratamiento se basa inicialmente en la prevención de la principal complicación del flutter: que se produzca una embolia por la migración de un coágulo sanguíneo que bloquee un vaso, y que provoque, por ejemplo, un accidente cerebrovascular. El tratamiento anticoagulante que se aplica sólo es provisional, porque una técnica permite curar el flutter: se trata de la ablación por radiofrecuencia a nivel del circuito defectuoso.