Alimentación del niño de 4 meses a un año

Aunque antes de los seis meses de edad, los bebés pueden empezar a probar dosis pequeñas de papilla, su alimentación consiste casi exclusivamente de leche. A partir del medio año de edad, los bebés empiezan a comer y a incorporar más alimentos a su dieta de forma progresiva.

Qué puede comer un bebé de 4 meses de edad

A partir del cuarto mes, el bebé puede empezar a comer otro tipo de alimentos, además de la leche. Se puede comenzar con una papilla de frutas por la tarde. Los alimentos se deben integrar poco a poco al régimen alimenticio del bebé.

Mi bebé de 4 meses ya puede comer papillas

Se pueden introducir paulatinamente los cereales (al principio, se recomienda que sean sin gluten para evitar sensibilidad) y las papillas de frutas, como naranja, manzana y pera. De manera progresiva, se incorporan otros frutos como plátano, uva y ciruela. No importa qué se agregue primero a la dieta del bebé, si las frutas o los cereales, pero sí es fundamental no añadir azúcar a las papillas.

Etapas del bebé de 4 meses

En esta etapa se realiza el cambio de la succión a la cuchara, lo que permite al bebé saborear mejor los alimentos. También cambia la textura (de líquido a triturado) y, una vez que aparezcan los primeros dientes, el bebé muerde trocitos.

Qué puede comer mi bebé de 5 meses

Si a los 4 meses no se incorporaron las papillas de fruta, se pueden introducir ahora, pero debe ser una a una por si aparece alguna alergia. A partir de los 5 meses, se integran los purés de verduras, como calabacín, zanahoria, puerro y patata. La dieta debe ser variada, aunque se debe probar una verdura primero y después otra, en caso de que se presente alguna reacción.

Los purés de verduras se pueden preparar en mayor cantidad y, así, congelarlos para utilizarlos en los días posteriores. También son fáciles de transportar durante un viaje. Los purés deben ser variados para que el bebé pruebe verduras y alimentos nuevos. De esta manera, se va acostumbrando a diferentes sabores. El pediatra da la pauta para introducir carnes y pescados, además de diferentes verduras y frutas.

Una receta sencilla y nutritiva es el puré de verduras con pollo. Para prepararlo, se necesitan 2 patatas, 1 calabacín, 1 puerro, 2 zanahorias, 1 pechuga de pollo y, para condimentar, un poco de aceite de oliva, pimienta blanca y sal. Otras opciones de puré son los de calabacín, calabaza, pescado, crema de setas, puré de cocido (caldo de res), patata o judías verdes.

Bebé de 4 meses a un año: la leche continúa muy presente

Continúa la lactancia materna o se pasa a la leche de segunda etapa. El bebé descubre las distintas posibilidades de las verduras. Se puede empezar con un biberón del caldo de cocción de las verduras y, en dos semanas, llegar a un biberón de sopa espesa de verduras. En este último caso, se recomienda utilizar un biberón de boca ancha. De esta forma, se puede dar el biberón del mediodía y un pote pequeño de verduras, aumentando un poco cada día la cantidad, hasta llegar a una taza pequeña con 130 gramos de verduras, que ya se pueden dar con cuchara. Además de un biberón con 150 ml de agua y 5 medidas de leche.

Bebé de 5 a 10 meses: un solo alimento cada vez

Es mejor dar de comer al bebé frutas o verduras, sin mezclarlas.

Verduras para bebés

Aunque la patata en pequeñas cantidades puede servir de base, es mejor proponer una verdura por día (además de las papas) para que el bebé aprecie el sabor. Así, puede descubrir las zanahorias, las judías verdes (ejotes), las espinacas, el calabacín (sin semillas y sin piel), la calabaza o los guisantes extra finos. Se recomienda limitar las acelgas y endivias porque contienen mucha fibra y es importante tener en cuenta que la zanahoria estriñe. También hay que evitar los sabores fuertes, las verduras que tengan demasiada fibra y los alimentos con riesgo de provocar alergias como la col, el rábano, el nabo, la cebolla, el tomate, el apio, la alcachofa, el pimiento, la berenjena y el perejil. Pueden utilizarse tanto verduras congeladas como frescas, incluso las verduras del huerto si se limita el uso de pesticidas.

El bebé prueba frutas sin azúcar

Se empieza a dar frutas 15 días después de haber introducido las verduras para evitar que el niño prefiera el dulce y rechace la verdura. Al mediodía o como complemento del biberón, se propone una compota de frutas, si es posible presentar una sola fruta cada vez. Estas deben ser maduras y cocinadas, pueden mezclarse las compotas de frutas hechas en casa con las compradas. Se recomienda retrasar el descubrimiento de algunas frutas, como el kiwi, hasta después del año de vida.

Fórmula para bebés

Es posible añadir 1 o 2 cucharitas de fórmula o alimento en polvo de primera etapa y sin gluten en el biberón de la noche, si el niño tiene hambre.

La alimentación de un bebé de 6 meses

Hay mamás que alargan la lactancia hasta los 6 meses y, a partir de este momento, empiezan a ofrecer comida a su bebé. También se puede prolongar hasta este momento la leche de fórmula. Pero es importante considerar que, a partir de los 6 meses, el bebé necesita hierro y zinc. Como norma general, se deben introducir los alimentos uno a uno y, de preferencia, en las comidas del mediodía, ya que si es en la noche y el niño tiene una reacción alérgica mientras duerme, es menos probable que nos demos cuenta.

A esta edad el bebé puede comer casi de todo y podemos empezar por las verduras, las frutas y los cereales (durante los primeros días, sin gluten). Los cereales se pueden sustituir por una papilla de arroz o de sémola de arroz. Se aconseja evitar todas las verduras que sean de hoja hasta los doce meses. Este también es el momento para introducir carne, pescado y huevos.

Bebé de 5 a 7 meses: descubrimiento de la carne

Al bebé se le dan 4 comidas al día, todavía con mucha leche materna o leche de segunda etapa, además de frutas y hortalizas. Se añaden de 10 a 20 gramos de carne al puré del mediodía. El descubrimiento de los derivados de la leche se hace de preferencia con los especiales para bebé, ya que su contenido en proteínas es reducido y están enriquecidos con hierro y ácidos grasos esenciales. Evitar los despojos y la charcutería, excepto el jamón dulce o jamón york.

Bebé de 7 a 8 meses: cada vez más descubrimientos

Además de dar siempre cuatro comidas al día, se prepara zumo (jugo) de frutas 100 % y sin azúcar añadida, que debe beberse por la mañana. También se añade una punta de mantequilla o una cucharita de aceite vegetal crudo en las verduras, alternando el aceite de colza, girasol, nuez, soya, maíz, oliva o una mezcla de aceites vegetales. Con las verduras del mediodía, se pueden mezclar 20 gramos de pescado (no empanizado) o la mitad de una yema de huevo duro. La comida se puede completar con una galleta.

Bebé de 9 a 12 meses: introducción de los trocitos

El niño puede comenzar a comer trocitos de verduras cocinadas, frutas o queso, con la condición de que él mismo los tome de un plato con los dedos. Los trocitos los puede rechazar si se mezclan con los purés o las compotas. La sopa de la noche puede acompañarse con una pequeña porción de pasta, fideos o tapioca.

Comidas para bebés de un año

Los bebés de un año de edad ya pueden ingerir cualquier tipo de comida, pero siempre acompañado de un adulto por si sufre un atragantamiento. Hay que ser cuidadosos con ciertos alimentos, como las palomitas, las uvas y los trozos de salchichas, entre otros. A esta edad pueden comer legumbres, cereales y granos, toda clase de verduras y frutas, productos lácteos (se recomienda leche de vaca con grasa, yogur con grasa o quesos blancos), carnes magras, pescados (evitar los mariscos) y huevos con clara. Cuando sea necesario cocinar, utilizar de preferencia aceites vegetales de oliva o de alguna semilla.

Comidas para bebés de más de un año

A partir del año de edad, se habla de alimentación diversificada. La leche de segunda etapa se sustituye por la leche de crecimiento. Se dan de 500 a 800 ml hasta los tres años. Desde los 12 meses hasta los tres años de edad, se descubren sabores y texturas. Es importante tener en cuenta que este es el periodo de oposición y no se debe forzar al niño, aunque siempre se han de mantener las cuatro comidas. A veces, después de los tres años, se desarrolla la llamada neofobia, es decir, el miedo a descubrir nuevos alimentos.

Entre las recomendaciones de buena higiene alimentaria, se destaca evitar los fritos, no dar legumbres secas hasta después de los 18 meses, evitar el picoteo entre comidas, limitar el azúcar y dar solo agua durante las comidas.

Terminología de la leche del bebé

A la leche del nacimiento y hasta de 4 a 6 meses, se le denomina leche de primera etapa o leche para lactantes. A la leche de 4 a 6 meses y hasta 12 meses, se le llama leche de segunda etapa o leche de continuación. A la leche de 10 a 12 meses y hasta los 3 años, se le conoce como leche de crecimiento o preparaciones para niño en edad temprana.

Foto: © Oksana Kuzmina – Shutterstock.com

CCM Salud es una publicación informativa realizada por un equipo de especialistas de la salud.
El documento « Alimentación del niño de 4 meses a un año » se encuentra disponible bajo una licencia Creative Commons. Puedes copiarlo o modificarlo libremente. No olvides citar a CCM Salud (salud.ccm.net) como tu fuente de información.
Únete a la comunidad