El yoga acuático
El yoga acuático, que usa las posturas del yoga clásico, se practica en el agua a 32 °. Es una disciplina que mejora el control de los movimientos y de la respiración.
La práctica del yoga acuático
El yoga acuático se practica:
- En piscina:
- A una temperatura del agua de al menos 32°.
- De menos de un metro de profundidad. Los ejercicios se practican a una profundidad en que se pueda ponerse en pie, para sentirse seguro.
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- Se usa una máscara de buceo.
- Acompañado de una música oriental suave.
- En sesión de una hora a tres horas.
Los beneficios del yoga acuático
- Beneficios para la mente:
- Relajación y desaparición del estrés.
- Concentración.
- Beneficios para el cuerpo:
- Eliminación de las toxinas.
- Remodelación y tonificación del cuerpo: espalda, glúteos, muslos, abdomen.
Los ejercicios
- Inspiración luego espiración en el agua para hacer más profundo su espiración.
- Coordinación de los movimientos y de la respiración.
- Con las posturas clásicas del yoga.
- Con ondulaciones del cuerpo y en especial de la columna vertebral.
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- Después de haber vaciado el aire de los pulmones, nos sentamos luego nos recostamos (para los más experimentados) en el fondo de la piscina, relajando el cuerpo y dejándose llevar por los movimientos del agua.
¿Quiénes pueden practicar el yoga acuático?
- Todos pueden practicar el yoga acuático.
- No se necesita ninguna experiencia previa para practicar el yoga acuático.
- Se recomienda especialmente para:
- Las mujeres embarazadas.
- Las personas en convalecencia.
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- Los músculos y las articulaciones se benefician del apoyo del agua en los movimientos.
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