La isoleucina es un aminoácido esencial y no soluble en el agua. Es una proteína que sólo ingresa al organismo a través de la alimentación. La función de la isoleucina es permitir a los músculos recuperarse después de un esfuerzo físico y mantenerse en forma. Los músculos utilizan la isoleucina como fuente de energía. La isoleucina también favorece el transporte de los glóbulos rojos, y por tanto del oxígeno, en el cuerpo. También permite controlar la glucemia. La encontramos en las verduras y en los frutos secos, los champiñones y los cereales completos entre otros.