La artrografía es una técnica radiográfica que permite visualizar las articulaciones del cuerpo. Una inyección de un producto opaco a los rayos X, llamado producto de contraste, a menudo fabricado a base de yodo (siempre que no haya problema de alergias) precede a las radiografías. La artrografía se realiza para estudiar anomalías en las articulaciones. Se utiliza principalmente para las articulaciones de la rodilla, el hombro y la cadera y raramente en el tobillo, la muñeca y el codo. Una técnica más reciente para el estudio de las articulaciones superficiales es la artroscopia, que permite la introducción de un sistema óptico para ver directamente el interior de la articulación en una pantalla, tiende actualmente a reemplazar la artrografía.