La dilución homeopática es una de las fases de la fabricación de los tratamientos homeopáticos. Consiste en obtener una concentración de la sustancia activa del medicamento inferior a la de origen. La sustancia activa es una toxina que tiene las mismas características que la enfermedad contra la que lucha. La dilución homeopática la diluye hasta volverla casi inexistente en el tratamiento. El organismo, al enfrentarse a esta sustancia disminuída, puede combatirla de una forma más eficaz.