El plomo es un metal gris negro, que encontramos distribuído en toda la corteza terrestre y en diferentes materiales fabricados por el hombre. Ingerido o inhalado, el plomo es tóxico. Se encuentra en la sangre donde será acumulado en el organismo, especialmente a nivel de los tejidos blandos. Una contaminación por plomo provoca el saturnismo y provoca diferentes síntomas como transtornos digestivos, anemia, insuficiencia renal, encefalopatías, esterilidad...Su tasa en sangre se puede medir a través de la plombemia.