La microftalmia corresponde a una anomalía congénita (que aparece desde el momento del nacimiento) que se caracteriza por un tamaño anormalmente pequeño del globo ocular. Puede ser unilateral o bilateral y conducir a una pérdida total de la visión en un 10% de los casos aproximadamente. Esta anomalía puede ser hereditaria o secundaria al virus de la rubeola. El diagnóstico es clínico con la observación del globo ocular por parte de un oftalmólogo. La ecografía ocular permitirá confirmar el diagnóstico y apreciar la extensión de la lesiones. Existen diversas prótesis que se colocan en la cavidad orbitaria del recién nacido cuya función consiste en mejorar el desarrollo del ojo.