Los largos viajes en coche, bus o en tren y algunas veces incluso los viajes cortos pueden volverse un infierno para todos los que padecen de mareos al viajar en coche. Es un verdadero calvario y afecta a millones de personas en el mundo. Los mareos en los medios de transporte se pueden tratar y prevenirse mediante el consumo de medicamentos y la realización de técnicas simples.
Las causas
- Falta de concordancia entre la información y el equilibrio causados por un movimiento muy rápido:
- Transversal (cabeceo).
- Sagital (balanceo).
- Vertical.
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- Excitación muy fuerte de los receptores sensoriales:
- Miedo.
- Balanceo del estómago y las vísceras.
- Abuso de alcohol y de tabaco.
- Cansancio y frio.
- Malos olores. .
Las consecuencias
- Disminución de las capacidades mentales y físicas.
- Mareo y desequilibrio.
- Cefaleas, palidez, sudores fríos.
- Sudoración, hipersalivación.
- Vómitos de alimentos y bilis.
- Somnolencia.
- Disminución de la presión arterial y de la temperatura.
Prevención y tratamiento
- Recostar al enfermo para reducir los movimientos.
- No viajar con el estómago vacío sino comer algo ligero, evitando el alcohol, las materias grasas y los productos lácteos.
- Beber pequeñas cantidades de agua, zumo de frutas o soda.
- Evitar ciertos olores: pescado, carne, tabaco, gasolina...
- No pensar en el mareo, contemplar el paisaje, airear el espíritu.
- No cubrirse demasiado.
- En coche, hacer paradas cada hora.
- En barco o avión, escoger los asientos del medio donde los movimientos son más ligeros.
- Escoger un nivel sonoro suave y relajante.
- Evitar leer o mirar el horizonte en un punto fijo.
- Chupar un limón o tomar regaliz para evitar los reflujos gástricos y los vómitos.
- Se recomiendan los antihistamínicos..