El sarampión es una enfermedad infecciosa, exantemática como la rubéola y la varicela, bastante frecuente, especialmente en niños o adolescentes, causada por un virus (un paramixovirus del género Morbillivirus).
Se caracteriza por típicas manchas en la piel de color rojo (exantema) así como fiebre y un estado general debilitado.
También puede, en algunos casos de complicaciones, causar inflamación en los pulmones y el cerebro que amenazan la vida del paciente.
El sarampión, enfermedad viral muy contagiosa, es la enfermedad eruptiva acompañada de fiebre más frecuente.
El sarampión se contagia a través de la respiración (contacto con fluidos nasales y bucales de una persona infectada, ya sea directamente o a través de vía aérea) y es altamente contagiosa.
El sarampión aparece entre 1 y 3 años de edad, cuando los niños no están vacunados o ya no están inmunizados por los anticuerpos de su madre.
El período de incubación es de alrededor de 10 días después del contagio y antes de la llegada de los primeros síntomas.
El contagio llega a su punto álgido 3 días antes del inicio de la erupción.
El sarampión se prolonga alrededor de 1 a 3 semanas. .
Evitar el contacto con una mujer embarazada debido a los riesgos de aborto.
La fiebre desaparece salvo en caso de complicaciones.
Las complicaciones del sarampión pueden en ocasiones provocar la muerte.
Las complicaciones, de las que algunas pueden ser graves, se pueden manifestar incluso años después de haber pasado el sarampión.