El éter diatílico, conocido habitualmente como éter, es un líquido incoloro, inflamable y tóxico. Fue utilizado en medicina por sus propiedades anestésicas pero después se ha preferido utilizar otros productos por sus efectos secundarios nocivos (náuseas, riesgo de dependencia). El éter puede ser utilizado como producto psicótropo por inhalación de su vapor. Sus efectos sobre el organismo y, especialmente, sobre el cerebro son bastante destructivos y pueden provocar daños psiquiátricos irreversibles.