La andrología está destinada al hombre como la ginecología a las mujeres. Estudia todas las afecciones relacionadas con los hombres, especialmente la impotencia, la disfunción eréctil (aproximadamente el 25% de los hombres) y la eyaculación. Esta disciplina ha surgido recientemente y se ocupa no sólo de los problemas relacionados con el aparato genital de los hombres, sino también los trastornos urológicos. Se recomienda una consulta anual, sobre todo en los hombres mayores de 40 años.