Las fosfatasas son enzimas capaces de actuar sobre el ADN (o el ARN) retirando el fosfato de sus moléculas. Están fundamentalmente presentes en el hígado, los riñones y los intestinos. A nivel médico, la determinación sanguínea de las fosfatasas es interesante porque si su tasa es excesiva puede hacernos sospechas problemas hepáticos, patologías óseas graves (enfermedad de Paget, por ejemplo) o cánceres de hueso o de órganos genitales. Además de su determinación sanguínea es indispensable un exámen médico completo.