El gasto energético es la cantidad de energía que gasta una persona. Esta energía la utiliza el organismo para hacer funcionar correctamente y asegurar todas sus funciones de base. Este gasto energético depende de tres elementos esenciales: la energía necesaria para el funcionamiento de base (respiración, latidos cardíacos,...), la cantidad de energía necesaria para la digestión y la tasa de gasto energético en caso de actividad física (variable en función de diversos factores como la edad, el peso o la intensidad del esfuerzo).