La harmalina es una sustancia que encontramos en ciertas plantas leñosas originarias de América del Sur como la ayahuasca (lianas que pertenecen al género de las Banisteriopsis). La harmalina tiene propiedades de antagonista serotoninérgico, es decir, que provoca reacciones equivalentes a las provocadas por el LSD o el éxtasis que actúan sobre los receptores de la serotonina. La harmalina es, pues, alucinógeno y la utilizan los chamanes de la Amazonía. A veces también se emplea en medicina como analgésico (antidolor).