Cólico nefrítico

El cólico nefrítico consiste en la aparición repentina de un dolor agudo y violento. Por lo general, este dolor aparece en un solo lado de la región lumbar, sin embargo es posible que se extienda hacia el otro costado o hacia la zona del ano y de los genitales.

Esta sensación de dolor es la consecuencia de una gran tensión causada por una obstrucción en las vías excretoras del aparato urinario superior.

El aparato urinario

El aparato urinario está formado por:

  • Dos riñones.
  • Dos uréteres.
  • Una vejiga.
  • Una uretra.
  • La orina es elaborada a partir de la sangre filtrada en los riñones.
  • Enseguida, es transportada, a través de dos conductos pequeños llamados uréteres, desde los riñones hasta la vejiga donde es almacenada.
  • Finalmente, al miccionar, la orina contenida en la vejiga es transportada a través de un último conducto llamado uretra hasta el meato urinario (orificio a través del cual la orina sale del organismo).

Causas

  • Por lo general, el cólico nefrítico se debe a una obstrucción de las vías excretoras situadas entre el riñón y la vejiga.
  • El flujo de orina disminuye o es completamente detenido.
  • Por lo general, la obstrucción de las vías excretoras se debe a un cálculo (litiasis urinaria).
  • Estos cálculos pueden formarse a partir de la orina contenida en los riñones o en las vías urinarias.
  • En la mayoría de los casos están conformados a partir de calcio (visibles en las radiografías). Entre estos los más comunes son aquellos que se componen de oxalato de calcio (más del 50% de los casos).
  • En segundo lugar tenemos a los cálculos de ácido úrico (producido a partir de la degradación de las proteínas).
  • Finalmente, los cálculos menos comunes son aquellos de cistina. La aparición de este tipo de cálculo se debe a una enfermedad heraditaria llamada cistinuria.

Consecuencias

  • Bloqueo y estancamiento de la orina debido a un cálculo.
  • La acumulación de orina da lugar a una hipertensión aguda que provoca un dolor intenso. Este dolor puede extenderse hacia el riñon o hacia la uretra (dolor renal).
  • El paciente experimenta grandes molestias o dolores.
  • Por lo general, este dolor se presenta acompañado de náuseas, vómitos, dificultades para miccionar o presencia de sangre en la orina.
  • En los casos de cólicos menos intensos el paciente no presenta fiebre.

Tratamiento

  • La probabilidad de que los síntomas se agraven depende del tratamiento terapéutico.
  • En un primer momento, la prioridad será aliviar el dolor. Para ello es necesario recurrir a un tratamiento a base de analgésicos, ya sea por vía inyectable u oral.
  • Enseguida, deberán realizarse exámenes complementarios (una radiografía de abdomen o una ecografía renal) para confirmar el diagnóstico. Asimismo, estos exámenes permitirán determinar la naturaleza del cálculo (radio-opaco o no) además de su ubicación y repercusión (dilatación) en el riñón y en la uretra.
  • Mientras el dolor persista será necesario disminuir el consumo de líquidos. De esta manera se podrá disminuir la tensión de las vías excretoras.
  • Una vez el dolor haya desaparecido es importante una abundante hidratación.
  • Si el paciente padece una recaída sin signos de infección (pielonefritis), con una eliminación normal de la orina y una respuesta favorable a los analagésico, entonces la hospitalización no es necesaria.
  • Los cálculos de diámetro inferior a 6 milímetros pueden ser expulsados de manera espontánea con la orina.
  • Si el paciente presenta un cuadro complicado (dolor acompañado de una infección), entonces es necesario hospitalizarlo ya sea para recibir un tratamiento médico o para someterse a una cirugía.
  • El objetivo es drenar la orina acumulada por encima de la obstrucción..
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