El término prematuro se utiliza para describir a un bebé nacido en un parto que ocurre antes de la 37 semana de amenorrea (SA), mientras que la gestación normal es normalmente de 40 SA.
Entre 32 y 37 semanas, hablamos moderada prematuridad
Se habla de un gran prematuridad y de niños prematurísimos
Hablamos de prematuridad extrema: un niño nacido antes de las 22 semanas se considera inviable.
Ocurren en aproximadamente el 6% de los nacimientos en todo el mundo.
Numerosas causas pueden ser responsables de un parto prematuro: infecciones maternas, embarazos múltiples, el consumo de tabaco durante el embarazo ... El parto prematuro a veces se puede provocar en algunos casos de necesidad.
Dependiendo del grado de prematuridad y de las circunstancias, el bebé prematuro puede necesitar una hospitalización en un servicio especializado de neonatología, de una medicación especializada para ayudar a la maduración de los órganos inmaduros, especialmente los pulmones. Después puede ser necesario un seguimiento y una atención posnatal particular.