El polen de abeja se recoge en la entrada de la colmena. Está compuesto de polen de flores y varias sustancias producidas por las abejas. En el comercio, se encuentra generalmente en forma de pequeñas bolas de polvo de polen desecado o en cápsulas. Se utiliza en el tratamiento de la hipertrofia prostática ya que permite reducir las micciones nocturnas. También combate los sofocos de la menopausia. Desafortunadamente, puede provocar reacciones alérgicas, dificultad para respirar e incluso un choque anafiláctico en los casos más graves.