Emla 5% es un anestésico local a base de lidocaína y de prilocaína, en presentación de una crema en tubo. Sirve para insensibilizar la piel y los tejidos poco profundos con el fin de efectuar intervenciones rápidas y que no necesitan una fuerte anestesia (inyección, punción, pequeña cirugía láser). Emla también existe en forma de venda adhesiva oclusiva.
En el adulto y el niño, Emla puede ser aplicado para anestesiar una zona de la piel con vistas a una punción o una inyección subcutánea o venosa. Puede también ser utilizada en previsión de un acto quirúrgico superficial de la piel (por ejemplo: ablación de una verruga), ya sea que se trate de una cirugía instrumental o de láser. En el adulto únicamente, la crema Emla puede ser empleada para anestesiar las mucosas genitales antes de una intervención o para anestesiar las úlceras en la pierna antes de su limpieza.
La crema Emla es estrictamente contraindicada en el bebé prematuro de menos de 37 semanas, la mujer embarazada y en las personas alérgicas a uno de los componentes de la crema o que tienen antecedentes alérgicos a otros productos anestésicos. Es también contraindicada en las personas que sufren de porfirias o de metahemoglobinemia congénita. La crema Emla no debe entrar en contacto con los ojos. Debe ser utilizada con precaución en las personas que siguen un tratamiento a base de flutamida, a base de sulfamida, o nitroprussiato de sodio, metoclopramida o de dapsona.
Nota: Los deportistas deben saber que el uso de esta crema puede provocar el resultado positivo a la prueba antidopaje.
La crema Emla puede provocar diversas reacciones alérgicas cutáneas y benignas (enrojecimientos, picores, eczema) y, en casos raros, una grave reacción alérgica generalizada como un choque anafiláctico. Una sobredosis puede causar una metahemoglobinemia, en particular en el bebé de menos de 3 meses. Lesiones en la piel como petequias pueden aparecer en el niño afectado por una patología cutánea en respuesta a la aplicación de la crema Emla.
Lavar cuidadosamente la zona de piel que hay que tratar y secarla bien. Aplicar una capa de crema bastante espesa, sin esparcirla, sobre toda la superficie que hay que anestesiar, luego recubrir la piel con un apósito oclusivo (salvo para las mucosas genitales). Sobre una piel sana, es recomendado dejar actuar la crema por lo menos una hora. El tiempo de exposición máximo aconsejado es de 4 horas (más allá, la crema pierde sus capacidades anestésicas). En cambio, en el niño y el adulto con lesiones cutáneas (por ejemplo: úlceras), el tiempo recomendado de aplicación es de solamente 30 minutos. En las mucosas genitales, el tiempo de aplicación puede variar de 5 a 15 minutos.
La dosis recomendada es de 2 a 3 g para anestesiar una pequeña superficie de piel. Si la zona que hay que tratar es mayor, la posología recomendada es 1 a 1,5 g de crema para 10 cm2 de piel. La dosis máxima autorizada es 50 g al día. En todos los casos, todo rastro de crema debe ser eliminado con la ayuda de una compresa antes de la intervención.