La stratum corneum es, como su propio nombre indica, la capa córnea, es decir, la parte más externa de la piel, la que está en contacto con el exterior. Esta capa posee numerosas células aplanadas (los corneocitos) que denominamos de forma abusiva células muertas pero que siguen siendo activas desde un punto de vista biológico. El papel fundamental de este stratum corneum es el de asegurar la protección de la piel. Esta función es posible sobretodo gracias a su riqueza en lípidos antibacterianos.