Los moretones en el cuerpo provienen de un shock o un traumatismo más o menos importante. En el lenguaje médico, hablamos de equimosis. Las equimosis se presentan como manchas de color azul que aparecen en la piel, aunque a veces pueden presentar otras coloraciones durante su evolución como púrpura, negro o amarillo. Son el resultado de la ruptura de pequeños vasos sanguíneos que causan la acumulación de sangre en el tejido debajo de la piel. Los morados suelen desaparecer espontáneamente después de unos días. Los ancianos son más propensos a padecerlos porque su piel es más delicada y es más probable que les queden marcas.