La hipoacusia significa una reducción en las capacidades auditivas. Cuando la pérdida auditiva es profunda, hablamos de sordera.
Una pérdida de audición como la sordera puede tener causas externas, como por ejemplo un exceso de cera en los oídos o algunas malformaciones, o puede provenir del oído medio como ciertas otitis algunas infecciones, tumores o una anomalía del tímpano llamada otosclerosis. Otros trastornos de la audición puede ser debidos a una alteración en el oído interno causada por ciertos medicamentos, infecciones como las paperas o enfermedades como la enfermedad de Menière. Finalmente también puede deberse a una afectación del nervio de la audición como en el caso del neurinoma o la progresión de la esclerosis en placas.
Para identficar una incapacidad auditiva o dificultades de audición realizamos los test auditivos.