Interferón beta: Indicaciones, posología y efectos secundarios
El interferón beta es una proteína naturalmente presente en el organismo. Desempeña un papel inmunitario. Sin embargo, el interferón beta también es sintetizado por diferentes procedimientos biotecnológicos para ser utilizados para fines terapéuticos.
Usos
El interferón beta es utilizado para fines terapéuticos. Como medicamento antiinfeccioso, el interferón beta sirve para luchar contra numerosos cánceres en complemento de tratamientos de quimioterapia y radioterapia. Puede ser empleado contra la esclerosis múltiple. Aunque no permite curar esta patología, puede ralentizar su evolución.
Como tratamiento preventivo, permite evitar las enfermedades respiratorias virales invernales (resfriado y gripe). Es administrado en este caso, en bajas dosis por vía nasal. En forma de crema, utilizamos también el interferón beta para cuidar algunas queratosis (espesamiento de la piel), algunos cánceres cutáneos y a veces verrugas genitales.
Propiedades
Naturalmente, el interferón beta es una sustancia que desempeña un papel inmunitario disminuyendo la proliferación de las infecciones bacterianas o virales. Esto deja el tiempo al organismo de poner en marcha su respuesta inmunitaria y los diferentes procedimientos de defensas de los que dispone. De este modo, el interferón beta contribuye a la protección contra las infecciones y las enfermedades.
Modo de administración
Habitualmente el interferón beta se administra por inyección intramuscular, a veces por vía intravenosa. También existen medicamentos a base de interferón que pueden ser administrados por vía nasal. Por otro lado, ciertos tratamientos a base de interferón beta se presentan también en forma de crema. Estas últimas son destinadas sobre todo a incitar el organismo a producir por sí mismo el interferón alfa.
Efectos secundarios
El interferón beta es una sustancia que es susceptible de provocar toda una serie de efectos secundarios más o menos graves. La mayoría son parecidos a los observados en caso de estado gripal, como fiebre, rigidez muscular, dolores de cabeza, cansancio y vértigos. Otros son más generales, como depresión, insomnio, cambios de humor, incluso arritmia cardiaca.
A veces también se produce diarreas, un adelgazamiento de los cabellos, erupciones cutáneas o incluso un dolor en el lugar donde la inyección ha sido colocada.
Medicamentos que contienen interferón beta
Existen algunos medicamentos que contienen interferón beta. Estos son utilizados particularmente en el marco del tratamiento de la esclerosis múltiple. Por ejemplo: Avonex, Betaferon, Extavia y Rebif.