La onicogrifosis designe un aumento anormal del grosor de una uña. En general suele localizarse a nivel de la uña del dedo gordo del pie pero puede afectar a cualquier uña comprendidas las de las manos. El envejecimiento es una causa natural de onicogrifosis. También traumatismos repetidos a nivel de la uña (por zapatos demasiado estrechos, práctica regular de deporte) pueden ocasionarlas. Otros casos pueden ser debidos a problemas de la circulación sanguínea o a enfermedades degenerativas o del sistema nervioso central pero son más raras. La onicogrifosis es fácil de identificar: la uña está gruesa (lo que provoca que sean más difíciles de cortar), estriada, oscura, abombada y deformada. La deformación puede conferirle diferentes aspectos, especialmente una deformación en gancho. Un podólogo puede tratarlas remojándolas y ablandando las uñas afectadas. En algunos casos puede ser necesaria una intervención quirúrgica con ablación de la matriz ungueal.