El violeta de genciana es un tratamiento muy eficaz contra la cándida albicans. Se utiliza sobretodo en las madres lactantes cuya areola se infecta y cuando, en este contexto, los bebés desarrollan infecciones bucales. Será suficiente con esterilizar los objetos que el bebé se lleva a la boca y aclararlos con esta solución. También podremos aplicarlo sobre el pezón. Sin embargo hay que tomar precauciones porque el violeta de genciana mancha mucho.