El volumen de distribución es un valor de repartición de una sustancia activa en el cuerpo. Esta noción es importante en la medida en que evalúa la forma cómo se difunde la molécula. Si el volumen de distribución es débil significa que la sustancia se ha absorbido poco y que se mantiene más bien en la sangre más que pasar a los tejidos. Inversamente cuando el volumen de distribución es elevado nos indica que la sustancia se ha absorbido correctamente y que será más activa.