Los ligamentos largos (el derecho y el izquierdo) son ligamentos que mantienen el útero, los ovarios y las trompas uterinas unidos entre sí. Este ligamento liga de forma bastante laxa los órganos genitales femeninos a la pared. El ligamento largo se prolonga hacia arriba por tres extensiones: los alerones peritoneales (que recubren el ligamento redondo, que fija el útero por delante), la trompa uterina y el ligamento propio del útero (que une el ovario al útero). El ligamento largo contiene numerosos vasos y nervios.