La presencia de espuma en la orina emitida por la mañana o en cualquier otro momento del día puede ser causada por una variedad de condiciones como la micción contundente, una proteinuria, una infección del tracto urinario o una fístula vesicocólica. Normalmente al orinar no se debe encontrar burbujas o espuma. Sin embargo, hay diversos motivos por los que después de una micción, se puede observar espuma en la taza del inodoro.
La orina espumosa puede estar causada por una micción rápida. A veces, cuando se retrasa ir al baño, se miccionan grandes cantidades de orina que al eliminarse rápidamente y con fuerza, puede provocar la aparición de espuma. También una orina concentrada, provocada por una escasa ingesta de líquidos, puede conducir a la aparición de una orina espumosa. La orina espumosa causada por la emisión fuerte de la orina o por la deshidratación no es patológica. Sin embargo, si al vaciar la vejiga con menos fuerza y beber mucha agua la espuma persiste, se deben descartar otras posibilidades.
La proteinuria (presencia de cantidades significativas de proteínas en la orina) es una de la causas más frecuentes de orina espumosa. Es normal que se excrete una pequeña cantidad de proteínas por la orina, pero cuando supera ciertos límites se habla de proteinuria. Los entes encargados de regular los niveles de proteínas en la orina son los glomérulos de los riñones. Cuando los glomérulos se infectan o se dañan y no pueden evitar que las proteínas se excreten por la orina aparece la proteinuria. Cuando las proteínas de la orina golpean la taza del inodoro después de la micción es cuando aparece la orina espumosa. La presencia anormal de proteínas en la orina se detecta a través de un análisis de orina.
También es posible encontrar cantidades excesivas de proteínas en la orina cuando se han ingerido grandes cantidades de pollo, pescado o de otros alimentos que contienen muchas proteínas. Si el cuerpo no descompone las proteínas de forma correcta, las proteínas ingeridas se eliminarán a través de la orina y provocarán orinas espumosas. Esto también puede ocurrir en las personas que toman suplementos de proteínas. En estos casos, es aconsejable dejar de consumir alimentos ricos en proteínas y suplementos y comprobar si el problema persiste.
La orina espumosa es uno de los síntomas de infección del tracto urinario y en general se acompaña por una sensación de ardor al orinar. La infección que activan los microorganismos hacen que aparezca espuma en la orina.
La fístula vesicocólica es una conexión anormal entre el colon y el tracto urinario. Una orina espumosa por fístula vesicocólica puede ser un indicador de condiciones médicas graves como tumores, enfermedad de Crohn, etc.
La presencia de semen en la orina puede provocar una orina espumosa en el hombre. En general después del coito pequeñas cantidades de esperma se quedan en la uretra. Esta cantidad, habitualmente, es insignificante y no suele provocar la aparición de una orina espumosa. En caso de que exista una eyaculación retrógrada (funcionamiento anómalo del esfínter de la vejiga), puede aparecer espuma en la orina.
Las personas con diabetes y cálculos renales también pueden presentar orina espumosa después de la micción.
Lo primero que suele realizarse es una tira reactiva o un análisis de orina para descartar la presencia excesiva de proteínas en la orina. En general para las pruebas de orina, se recoge orina durante 24 horas y se envían para obtener resultados precisos. Otras exploraciones complementarias pueden ser necesarias para llegar a un diagnóstico preciso.
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