El carácter sádico de un individuo corresponde a un perfil psicológico que siente placer al causar sufrimiento físico o moral a los demás. El sadismo no es necesariamente sexual, aunque a menudo se asocia; puede observarse en cierto tipo de gente que les gusta hacer daño a los demás, incluso a los animales. En el caso de sadismo en la sexualidad, la excitación erótica se logra al infligir dolor o humillación a la pareja. La personalidad sádica en general, tiende en mantener una relación de dominación hacia el otro mediante el uso de diversas armas como la mentira, el acoso, la violencia o la intimidación.