Una luxación designa un desplazamiento de una superficie articular en relación a otra, que dá lugar a una pérdida de contacto articular entre ellas.
La luxación a menudo es causada por un traumatismo: este desplazamiento es permanente si no se trata y la articulación puede quedar mas o menos funcional. También puede ser secundaria a una hiperlaxitud de los ligamentos.
En general causa dolor e impide el movimiento normal de las articulaciones. La luxación se acompaña a veces de una rotura de ligamentos. Ambas superficies articulares deben ponerse en su sitio rápidamente.
La reducción de una luxación es a menudo dolorosa y puede ser realizada bajo analgésicos, con la inhalación de un gas a menudo en los niños o incluso bajo anestesia general en caso de luxación importante de una gran articulación. Una inmovilización de la articulación a menudo es necesaria durante un período de tiempo. La luxación del hombro, de un dedo o incluso de la mandíbula son bastantes frecuentes. En ausencia de pérdida total de contacto lo llamamos subluxación.