Desde un punto de vista anatómico la epidermis designa la capa externa y superficial de la piel. Recubre la dermis y la hipodermis, los tejidos más profundos de la piel. La superficie de la epidermis está constituída principalmente por células muertas o escamas, que se renuevan constantemente. Otras cuatro capas celulares componen la epidermis, cuyo espesor total no sobrepasa 1 mm. Está recubierta en su superficie por una película protectora, el sebo.