El nefopam es un analgésico que se utiliza principalmente en los hospitales. Permite calmar el dolor agudo, fundamentalmente los dolores postoperatorios. Se administra por vía intravenosa en una solución de cloruro de sodio o en suero glucosado. La dosis habitual de nefopam es de 20 mg, que se inyecta cada 4 o 6 horas. La dosis total no debe sobrepasar los 120 mg/24 h. Pueden aparecer algunos efectos indeseables como somnolencia, náuseas, vómitos, vértigos...