Implantado en la región temporal, el hueso temporal interviene en la formación de la bóveda craneal y de las fosas craneales media y posterior. Como muchos de los huesos del cráneo, este hueso nace de la fusión de hueso timpanal, del hueso escamosal y del hueso pétreo que tiene lugar, en el ser humano, durante la adolescencia. Así, el hueso temporal ya no se describe como una formación ósea sino que se descompone en tres partes diferentes: la concha, la roca y la región mastoidea. Es importante señalar que la roca contiene la caja del tímpano implicada en la transmisión de los sonidos.