Existen alimentos que contienen pocas calorías y calman el hambre. El huevo duro, sobre todo la clara, es recomendado a todas las personas que deseen cuidar su peso o hacer dieta.
El huevo duro calma la sensación de hambre inmediatamente. Además, contiene pocas calorías, 80 kilocalorías aproximadamente. Es rico en proteínas y extiende la sensación de saciedad durante mucho tiempo.
Procura comer la clara de huevo y reducir tu consumo de yema, ya que contiene materias grasas y colesterol. Mientras que la clara de huevo contiene principalmente agua (más del 80 %), por lo que puede consumirse a voluntad.
Cuando prepares un huevo duro, retira la yema y consume la clara. La clara del huevo duro bajo esta forma provoca una sensación de saciedad que puede prolongarse hasta 3 horas aproximadamente.
Si estás a dieta, puedes consumir la clara de huevo duro en los platos de entrada o en las ensaladas. Existe una diversidad de platos que pueden ser preparados a base de clara de huevo.
La clara del huevo no contiene grasa ni colesterol y puedes consumir la cantidad de clara que desees.
Los huevos son alimentos que se utilizan en numerosos platos, pero cuyos beneficios se ignoran. Son ricos en antioxidantes y ayudan a luchar contra las enfermedades cardiovasculares, algunos tipos de cáncer y patologías del ojo relacionadas con el envejecimiento (como degeneración macular o las cataratas).
Además, el huevo es un alimento rico en proteínas que intervienen en la formación y la reparación de las células cutáneas, musculares y óseas.
Aproximadamente, 100 gramos de un huevo pasado por agua representan un valor energético de 141 calorías, 100 gramos de un huevo duro representan un valor energético de 134 calorías y 100 gramos de un huevo frito representan un valor energético de 205 calorías.
La yema del huevo contiene una gran cantidad de lípidos, ácidos grasos y colesterol. Una persona que tiene el colesterol elevado debe consumir 2 o 3 huevos como máximo por semana.
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