El Signo de Romberg es una manifestación clínica que permite poner en evidencia una pérdida de equilibrio y de coordinación provocada por un trastorno vestibular (afectación del oído interno) o una enfermedad que afecte al sistema nervioso central. El médico le pide al paciente que permanezca de pie, con los pies juntos y los brazos extendidos, y luego que cierre los ojos. El signo de Romberg es positivo cuando el paciente tiene dificultades para mantener el equilibrio. Permite deducir que la sensibilidad propioceptiva (profunda) del paciente está alterada.