Rectocele y cistocele designan lo que en lenguaje familiar se llama descenso de órganos o prolapso genital. Al principio puede manifestarse por una molestia simple pero si el problema persiste y se acentúa puede volverse una verdadera discapacidad. El examen urodinámico no es doloroso. Consiste simplemente en someter a un test la vejiga y su esfínter para evaluar el grado eventual de incontinencia o el riesgo de incontinencia urinaria.
La cirugía permite volver los órganos pelvianos a su sitio (recto, vejiga, útero). La hospitalización es relativamente corta (aproximadamente 4 o 5 días en promedio) y la convalecencia dura entre 2 a 4 semanas de descanso sin esfuerzo físico excesivo.