Se sitúa entre los 3 y los 7 años, la etapa fálica se describe en la teoría freudiana sobre la sexualidad infantil como la etapa durante la cual el niño descubre la naturaleza erógena de las partes genitales y uretrales. Este es también el momento en que descubre las diferencias sexuales y que constituye, poco a poco, su propia identidad sexual. Para Freud, la etapa fálica es el escenario de un conflicto que desgarra al niño. Es el complejo de Edipo según el cual el niño quiere casarse con su propia madre, pero simbólicamente debe matar a su padre para poder hacerlo.