Los linfocitos T auxiliares (o Th en inglés, que viene de T helper) intervienen unicamente cuando están asociados a antígenos específicos. Se multiplican con el objetivo de activar otras células inmunitarias, los linfocitos T y B, que podrán responder de forma más eficaz a la amenaza. Por eso se le llama auxiliares. También existen los linfocitos T auxiliares de memoria que sólo son capaces de unirse al primer antígeno que encuentren. Estos linfocitos Th intervenienen en la respuesta inmunitaria secundaria.