El pene se irrita durante las relaciones sexuales dando lugar a la aparición de pequeños puntos rojos. En otros casos, estas pequeñas lesiones son reacciones alérgicas o síntomas de una infección o enfermedad de transmisión sexual.
La infección por hongos Candida albicans es muy frecuente en mujeres con vaginitis. Este tipo de hongo crece en sitios húmedos y calientes, siendo la vagina ideal para ello.
La mujer transmite este hongo al pene del hombre mediante las relaciones sexuales. Como consecuencia, aparecen unas lesiones rojizas en el pene que producen una secreción blanquecina maloliente, además de picazón (en la mayoría de los casos).
Si el varón mantiene una correcta higiene y lava y seca su pene periódicamente, el hongo muere ya que necesita humedad para sobrevivir. Pero si no se asea con frecuencia, el hongo se desarrollará y las lesiones rojizas se extenderán por toda la zona genital.
Si te han salido puntitos rojos en el pene, se ha inflamado el prepucio o el glande o éste último ha adoptado un color demasiado rojo es probable que tengas balanitis.
La balanitis también produce ardor y picazón (tanto en el glande como en el resto del pene), así como manchas rojas a lo largo del miembro o secreciones blancas malolientes debajo del prepucio.
La balanitis no es una enfermedad sino el nombre que recibe la infección e inflamación del prepucio y/o glande. Las causas de la infección son múltiples.
Aunque la fimosis y la gonorrea (ETS) causan balanitis, la más común es la candidiasis. Se trata de una infección producida por el hongo Candida albicans. En estos casos, los puntos rojos no son dolorosos y tras el lavado se convierten en costra blanca que se cae sola. Es contagioso y se puede curar fácilmente con una pomada.
Cuando los puntitos rojos en el pene no producen dolor o escozor, lo más seguro es que no sea absolutamente nada y en un par de días desaparezcan. Muchas veces se trata de una reacción alérgica al lubricante del preservativo, a los espermicidas, al látex o a algún jabón.
En otros casos, los puntitos rojos pueden aparecer después de una relación sexual como consecuencia de una fuerte erección, siendo esos puntitos rojos vasos capilares dilatados que desaparecerán sin ningún problema.
La irritación propia del las relaciones sexuales es la causa más frecuente de los picores y manchitas rojas y blancas que aparecen en el glande, horas o días después del acto sexual.
Si primero notaste un hormigueo en el pene, seguido de picor, dolor y aparición de puntitos rojos, podría tratarse de un herpes genital causado por el virus del herpes simple (VHS). Se trata de una enfermedad de transmisión sexual (ETS) cuyos síntomas se manifiestan doce días después del contagio.
En el caso del VHS, los puntitos rojos tardan dos días en convertirse en ampollas que contienen un líquido blanquecino. Las ampollas terminan por reventar y dan lugar a unas dolorosísimas úlceras que tardan diez días en curarse. Aunque es una enfermedad muy molesta, tiene fácil tratamiento y existen numerosas terapias para aliviar el dolor.
La aparición aislada de puntos rojos en el pene sin dolor, síntomas asociados ni práctica sexual de riesgo, no suele ser indicativo de enfermedad.
Estos puntos rojos son relativamente frecuentes en los varones con vida sexual activa debido a una irritación de los genitales. Suelen desaparecer en unos días sin tratamiento. A veces pueden persistir durante semanas y reaparecer. Pero terminan desapareciendo y no vuelven a aparecer.
Para que los puntos rojos del glande desaparezcan, hay que abstenerse de mantener relaciones sexuales de forma intensa o prolongada, así como mantener una correcta higiene de los genitales.
Se recomienda lavar el pene con agua y jabón suave o neutro y secarlo con mucho cuidado. Si los puntos rojos no desaparecen con estas medidas simples, acude a tu médico de cabecera o dermatólogo.
Este tipo de lesiones son menos frecuentes en penes no circuncidados, ya que el prepucio (piel del glande) protege al glande de los roces e irritaciones.
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