Un papila es una pequeña protuberancia situada en la superficie de la piel o de diversas membranas mucosas (tejido blando que recubre el interior de una cavidad del cuerpo) y los órganos. Una papila suele estar ligada con terminaciones nerviosas, lo que le permite ofrecer información sensorial. Las papilas situadas en la lengua, llamadas papilas gustativas, son las responsables del sabor y de la percepción del sabor acido, amargo, dulce y salado. Las papilas dérmicas de la piel y, sobretodo, las que se encuentran en los extremos de los dedos, participan en el sentido del tacto y también forman las huellas dactilares. La papila óptica corresponde al punto de la retina donde no llegan los rayos de luz porque es la zona donde nace el nervio óptico.