La marcha atrás no es nada segura porque antes de la eyaculación el hombre secreta un líquido transparente (o líquido preseminal). Generalmente el hombre no se da cuenta y no es consciente de que está expulsando este preeyaculado. Existe una idea falsa de que sólo una eyaculación profunda dentro de la vagina de la mujer puede producir un embarazo.
¿Hay suficientes espermatozoides en el líquido preseminal como para poder conseguir una fertilización?. Esta es una cuestión controvertida...El hombre no siempre puede controlar su eyaculación a voluntad. Sí es posible que haya espermatozoides en el líquido preseminal si poco después de haber tenido una eyaculación el hombre eyacula de nuevo. Tras la primera eyaculación sigue habiendo espermatozoides vivos en la uretra. Así que, si se produce nuevamente líquido preseminal poco después de una eyaculación, este líquido preseminal se mezcla con los, todavía presentes, espermatozoides en la uretra. La fertilización depende de si hay suficientes espermatozoides, pero para estar más seguros, se aconseja que el hombre orine entre dos eyaculaciones, deshaciéndose así de los espermatozoides que pueda haber en la uretra.