Es normal que la menstruación pueda variar en términos de duración y frecuencia, y algunos factores pueden afectar el ciclo menstrual, como el estrés, cambios en el peso y en la actividad física, y cambios en la medicación.
Sin embargo, el retraso en la menstruación después de haber tenido relaciones sexuales es una señal de que es posible que estés embarazada. Es importante realizar una prueba de embarazo con una prueba de embarazo de venta libre o con una prueba de embarazo en el consultorio del médico para confirmar si estás embarazada o no. Si la prueba de embarazo es positiva, es importante programar una cita con un médico para recibir atención prenatal.
Además, el flujo vaginal de color marrón o café puede ser un signo de que hay una cantidad menor de sangre en el flujo menstrual, lo cual puede deberse a una infección, cambios hormonales o un cambio en el uso de anticonceptivos. Si el flujo es persistente o si tienes otros síntomas, como dolor abdominal o dolor durante las relaciones sexuales, es importante programar una cita con un médico para evaluar la causa y recibir tratamiento si es necesario.