En primer lugar, mencionas que tuviste relaciones sexuales con protección, lo cual es una excelente medida para prevenir embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual. Si el condón se utilizó correctamente durante toda la relación sexual, el riesgo de embarazo es bastante bajo.
Después de las relaciones sexuales, tuviste tu menstruación, lo cual es una señal de que el condón no se rompió y de que no hubo un embarazo en ese momento. Sin embargo, este mes experimentas un retraso menstrual de 3 días, lo cual puede generar preocupación.
Es importante tener en cuenta que el retraso menstrual no siempre se debe a un embarazo. Existen diversas causas que pueden provocar un retraso, como el estrés, cambios en el peso, algunas condiciones médicas como el síndrome de ovarios poliquísticos, y ciertos medicamentos. Además, las relaciones sexuales en sí no deberían afectar significativamente el ciclo menstrual.
Si estás preocupada por un posible embarazo, lo más recomendable es realizar una prueba de embarazo, especialmente si ya tienes un retraso menstrual. Si la prueba resulta negativa y el retraso persiste, es aconsejable consultar a un médico para determinar la causa del retraso y recibir orientación adecuada.
En resumen, aunque tuviste relaciones sexuales con protección y experimentaste tu menstruación después de la relación, es comprensible que te preocupes por un retraso menstrual. Sin embargo, existen diversas causas que pueden provocar un retraso que no están relacionadas con el embarazo. Realizar una prueba de embarazo y consultar a un médico en caso de dudas te ayudará a aclarar tu situación y recibir orientación adecuada.