La comunicación oral nos permite nombrar, describir y expresar sentimientos tales como el miedo, la angustia o la alegría. Es un modo de expresión que puede ayudar a superar los problemas de sociabilidad en los niños. Permite que el niño sea más extrovertido.
Los niños admiran y se sienten identificados con los héroes de los cuentos infantiles incluso si estos son presentados como personajes tontos o feos. Esta identificación del niño con el héroe le permite cambiar la percepción que tiene de sí mismo. Los cuentos infantiles ofrecen todas las herramientas psicológicas e intelectuales para que el niño mejore su autoestima.
Los niños tienen una visión desordenada del mundo. Los niños no identifican la relación entre dos o más hechos. Para ellos cada hecho es un acontecimiento totalmente nuevo.
Además, su estado emocional e intelectual se puede comparar con una llama que crece cada vez más. Los cuentos infantiles, narrados adecuadamente, permiten que el niño ordene sus pensamientos. Estas historias permiten que el niño sienta que no está solo y que comparta este mismo camino imaginario con los demás niños. En conclusión, los cuentos infantiles hacen que el niño supere su egocentrismo y se vuelva más sociable.