Las crisis moderadas de migraña pueden ser tratadas con medicamentos analgésicos.
Entre los analgésicos recomendados para la migraña moderada están el paracetamol, la aspirina, los antiinflamatorios no esteroideos, los opiáceos menores o la noramidopirina. Por lo general, estos medicamentos pueden ser adquiridos sin receta médica. Los analgésicos no sólo se utilizan para tratar la migraña, sino también para calmar el dolor de espalda o el dolor de muelas. Tu médico te informará acerca de la dosis, los efectos secundarios, las reacciones con otros fármacos o las contraindicaciones del medicamento que te ha prescrito.
El paracetamol es un medicamento utilizado en primera intención. Un tratamiento a base de paracetamol puede ser suficiente para calmar una crisis menor o inicial. El efecto tóxico de este medicamento es leve si es consumido a dosis pequeñas. La persona que consume este medicamento a dosis fuertes puede presentar un cuadro de toxicidad hepática.
La aspirina es un medicamento eficaz para aliviar la crisis de migraña. Es recomendable que los adultos consuman entre 500 y 1000 mg de aspirina (la mitad de una pastilla o un sobre de 1000 mg). Sin embargo, es necesario consultar con un médico antes de decidir la dosis.
Los antiinflamatorios no esteroideos (AINES) permiten aliviar el dolor de una crisis de migraña. Prevención: la aspirina y los AINES pueden provocar hemorragias o problemas gástricos.
Los principales opiáceos menores son la codeína, el dextropropoxifeno y el tramadol. Por lo general, estos medicamentos están contenidos en otros fármacos combinados con paracetamol.
Muchas personas que padecen migraña utilizan medicamentos que contienen noramidopirina o metamizol. Sin embargo, el consumo de este medicamento a dosis pequeñas puede ocasionar una disminuición repentina de cierto tipo de glóbulos blancos (agranulocitosis). Por este motivo, la noramidopirina no es recomendada para tratar un crisis de migraña.
Un tratamiento contra la migraña es eficaz si el dolor desaparece después de 2 horas; si el medicamento no causa ninguna reacción adversa en la persona; si basta con tomar el medicamento una sola vez; y si la persona puede retomar sus actividades dos horas después.
Si alguna de estas condiciones no se cumple, entonces se puede afirmar que el tratamiento no es muy eficaz. En este caso, será necesario consultar con el médico tratante para cambiar el tratamiento.
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