Hablamos de alcohol secundario para designar un alcohol que tiene, además de sus átomos de hidrógeno y oxígeno, dos átomos de carbono unidos a ellos. El alcohol isopropílico y ciclohexanol son alcoholes secundarios. Los alcoholes secundarios se utilizan como desengrasantes. También se encuentran en productos desinfectantes, disolventes o decapantes. Los alcoholes secundarios se añaden en algunos combustibles. Pueden formar parte de las composiciones de productos antisépticos o de masajes.