Entendemos por comportamiento antisocial a un transtorno de la personalidad que se manifiesta por la imposibilidad de adaptarse a las normas sociales. Este estado provoca un gran número de síntomas como un comportamiento agresivo, una impulsividad exagerada, la ausencia de sentimientos de culpabilidad (egocentrismo), dificultades para conservar un empleo, etc. En general, las personas que tienen un comportamiento antisocial (o sociópatas) tienen dificultades para aceptar la autoridad. Estas personas pueden ser pirómanas y crueles con los animales.