La terbutalina es una molécula medicamentosa que se emplea por sus grandes propiedades broncodilatadoras. En otras palabras, la terbutalina permite rapidamente aumentar el diámetro de los bronquios pulmonares. Por ello se utiliza, especialmente, en caso de crisis de asma graves y en el tratamiento de la EPOC en el adulto. La terbutalina también puede ser administrada a las mujeres embarazadas para prevenir los riesgos de parto prematuro: así se alarga el tiempo de gestación y se disminuye el riesgo de distress respiratorio del bebé. Los efectos secundarios más frecuentes son los dolores de cabeza, temblores, garganta irritada, rampas, tos y eventualmente palpitaciones cardíacas.